Bueno, no soy el único que lo hace... Pinchen acá para leer la nota de prensa.
En la investigación mongola de este número, se nos desvela por qué D. Alberto Chicote es capaz de comerse la bazofia de los peores tugurios de este país y, ¡de no haber ni tan siquiera padecido una indigestión! Este hombre tiene un estómago a prueba de bombas y, no tiene nada que ver con la portada de este número 20.
Mucha gente cree en los kisocos sólo se venden chicles y fascículos coleccionables de porquerías que no sirven para nada. Pues no, en los kioscos venden prensa, apoyen pues a su kiosquero: ¡COMPREN MONGOLIA en establecimientos especializados! No acabo de entender por qué en los bajos de una conocida cervecera nacionalista catalana (cuyo brebaje está elaborado en Zaragoza, ¡ja ja!) además de vender pan, también venden periódicos... Y con malos modales, no hay derecho. Cuando hayan aprendido a fabricar cerveza, ya hablaremos.
